Se dice que Francia es el país gastronómico por excelencia. Cada región tiene sus especialidades, y Estrasburgo no podía ser menos.
He aquí algunos de sus platos típicos, que se pueden degustar tanto en los restaurantes como en los winstubs, tabernas alsacianas de ambiente popular:
- Baeckeoffe: guiso de cerdo, cordero y buey, con patata al vino blanco alsaciano y cubierto de pasta.
- Bibeleskäs: queso blanco perfecto para acompañar las patatas salteadas.
- Choucroute: col blanca rayada fermentada en salmuera que sirve de acompañamiento a la charcutería, como a la salchicha Knack.
- Flammekeuche o tarta flambeada (mi favorito): pasta fina recubierta de nata, cebolla y chicharrón.
- Fleischschneke: caracoles de carne preparados con picadillo y pasta.
- Kougelhopf: brioche que se puede comer tanto en su versión dulce, con almendras y pasas, como en su versión salada, con chicharrones y nueces.
- Männele: brioche en forma de hombre que se come en la festividad de Santa Claus.
- Munster: queso de fuerte olor que se degusta tanto frío como caliente fundido sobre patatas.
- Schnaps: aguardiente elaborado a partir de ciruelas, peras o frambuesas, que sirve de punto final en las comidas.
- Wädele: codillo de cerdo que generalmente se sirve con choucroute.
No debe faltar la cerveza alsaciana, que viene elaborándose desde 1268!!
“Bon appétit” – Buen provecho!